Apicultura proactiva

Practica una apicultura proactiva. No llegues tarde al manejo de tus abejas.Anticípate.Sé proactivo y no reactivo.

 

Llegar tarde y reaccionar


Seguramente, una de las peores cosas que puede pasarte como apicultor en el manejo de tus abejas es llegar tarde. Cuando llegas tarde, debes reaccionar al comportamiento de tus abejas, y reaccionar, aunque necesario en ese momento, es indicativo de un descuido en el manejo

Una de las cosas que diferencian a un apicultor malo de uno bueno es la proactividad. Un buen apicultor es proactivo, no reactivo.

Debe prever el comportamiento de sus abejas, lo cual indica que conoce su biología básica  y, como vimos en el artículo «¿Qué es la apicultura?», esto permite predecir  su comportamiento. No es más que biología apícola aplicada.

Me refiero a llegar tarde a colocar las alzas y ver como tus abejas ya hicieron panales en la tapa…llegar tarde a revisar tus colmenas en primavera y encontrarte ya enjambres fuera, colgados de ramas en tu colmenar…llegar tarde a comprobar si tus abejas necesitan alimento y encontrarlas muertas…o ir a revisar tus abejas para añadir los cuadros que quitaste en invierno y encontrarte un panorama como el de la foto que abre este post.

Cualquiera de estas cosas te ocurrirá si o sí cuando eres principiante…y te volverán a ocurrir alguna vez en tu futura vida de apicultor.

A mí me han pasado y, como digo, algunas me siguen pasando a veces, aunque sé que no deberían, pero uno en ocasiones no puede visitar sus colmenas con la frecuencia que necesitan, o simplemente te descuidas.

Anticípate a varroa


ácaro varroa sobre una abeja adulta

No esperes a ver varroa encima de tus abejas.

Cuando las veas, ya será tarde, esto será señal de que habrá en la colmena un número más elevado del recomendable.

Anticípate, realiza un tratamiento en cuanto hagas la última cosecha.

Controla varroa ANTES de llegar al otoño.  En otoño necesitas un ciclo de cría de abejas sano, sin abejas parasitadas por el ácaro. La población de abejas que nace en otoño será la encargada de hacer que la colmena pase el invierno.

Para conseguir este último ciclo de cría de abejas no parasitadas por varroa tienes que tratar antes de que se produzca.

Debes llegar al otoño con abejas y colmenas ya limpias de varroa.

Anticípate con la alimentación


No esperes a ver una de tus colmenas sin comida, muerta por hambre, para alimentar al resto.

Anticípate y aporta alimento antes de recibir este aviso de tus abejas.

Para eso, valora en otoño las reservas de tus colmenas.

Vuelve a valorarlas al final del invierno e inicios de la primavera. En ese momento, ante la incipiente primavera, te confías, pero es el momento más peligroso para perder colmenas por falta de alimento.

Anticípate a la mielada


En la foto de arriba puedes ver la tapa de una colmena a la cual no le había colocado el alza con la suficiente antelación. El alza que ves en la foto acabo de colocarla y ahora añado encima la tapa de la colmena.

Tuve suerte, no había realeras en la colmena ni signos de enjambrazón, pues a pesar de la falta de espacio, la reina era joven, de un año, no se había bloqueado la cámara de cría (las abejas no habían almacenado miel en las celdillas de puesta de la reina), y el espacio debajo de la tapa para construir las había contenido.

Luego, en la cosecha, me dio la media alza totalmente llena, que pesados los botes de miel que dio fueron 15 kg ( no habría sido así si la colema hubiera enjambrado ).

Esto puede pasarle a cualquiera, aunque es un signo de falta de atención a tus abejas en el momento adecuado, o simplemente ocurre cuando tienes muchas colmenas y la primavera y las abejas explotan y no hay quien contenga aquello ni atienda tantas colmenas.

Anticípate a los enjambres


En la foto de arriba puedes ver un ejemplo de lo que digo: debido a un año complicado en lo personal no pude atender a mis abejas adecuadamente, y cuando lo hice…¡ya era tarde! ¡llegué tarde! ¡no pude anticiparme!. Tuve que recoger un enjambre colgado en una rama y en otras colmenas no había puesto las alzas a tiempo y comenzaron a construir en la tapa.

Me puedes ver entrando el enjambre en una caja. Si pinchas sobre la imagen para ampliarla y te fijas con detalle, verás que hay un cuadro dentro del núcleo. Se trata de un cuadro de cría que tomé de otra colmena del colmenar. No olvides para este año el truco para no perder tus enjambres.

Debes anticparte, ser proactivo y no reactivo y manejar con antelación el vigor de la población de tus colmenas.

Anticípate con los cuadros


Todo lo anterior puede pasarte y, especialmente, si tienen ya un número elevado de colmenas y asentamientos.

Pero nunca debería pasarte  lo que ves en la foto que abre el post, y por eso te prevengo.

Es probable que hayas leído en algún libro que sólo debe haber en la colmena el número cuadros que las abejas pueden cubrir y atender, pues de lo contrario pueden ser atacados por la polilla.

No estoy para nada de acuerdo con esto y no te recomiendo que lo hagas, a menos que quieras que a tu colmena le ocurra como a la de la foto, lo cual, para un principiante, será engorroso y difícil de arreglar.

El escenario de la foto suele ocurrir cuando, al empezar el invierno, ves que tus abejas ocupan un espacio de 4-6 cuadros y te llevas a casa el resto para que no sean atacados y luego volver a ponerlos al inicio de la primavera.

Si la primavera se adelanta y tus abejas son trabajadoras, comenzarán a desarrollarse y a expandir su nido de cría, y cuando acaben de ocupar totalmente los cuadros que les dejaste, si no tienen otros, construirán sus propios panales y …¡ desastre !

Mi recomendación es que dejes a tus abejas pasar todo el invierno con todos los cuadros en la colmena.

No serán atacados por la polilla durante el invierno debido a las bajas temperaturas (al menos en mi zona, si vives en Canarias o clima similar la cosa cambia), y tus abejas pasarán el invierno más calentitas y abrigadas con todo el espacio de la colmena ocupado por panales de cera que con un gran espacio vacío sin nada más que aire a su lado.

No digo que esté mal la opción de quitar los cuadros y poner una tabla o cuadro como partidor para retiralo al final del invierno y poner los cuadros, pero te exigirá una gran atención y anticipación. Dejando todos los cuadros estarás más tranquilo.

Resumen y recomendaciones


Así que ya sabes, y como conclusión, cuatro reglas de oro de la anticipación en tu manejo apícola:

1- Deja pasar el invierno a tu colmena siempre completa de cuadros. Imita lo que hacen las abejas en la naturaleza, nunca verás a un enjambre silvestre destruir los panales que no ocupa en invierno para volver a construirlos en primavera. Esto no se aplica si vives en un clima donde las temperaturas invernales no son lo suficientemente bajas como para evitar el ataque de la polilla.

Los panales son el «esqueleto» de la colmena, el esqueleto del «superorganismo»  enjambre, no rompas los «huesos» del esqueleto. Los panales, aún vacíos, influirán en la temperatura interna de la caja y en el proceso de termoregulación del enjambre durante el invierno.

2- Si usas colmenas con alzas, añádelas antes de que tus abejas ocupen los dos cuadros exteriores de la cámara de cría y, por supuesto, antes de que empiecen a construir panales en la tapa.

Esto ayudará a prevenir la enjambrazón. Si no lo haces así, lo más probable es que se bloquee la cámara de cría y la reina no tenga sitio para poner huevos, y aunque ahora añadas alzas y espacio, al hacerlo tarde, a destiempo, tus abejas enjambrarán a pesar de tus intentos de evitarlo pues ya se habrá desatado la fiebre de la enjambrazón.

3- Prepara el material que necesitarás durante la época de enjambrazón con mucha antelación a que esta comience. A finales de invierno debe ya estar listo. Ten preparados cuadros con cera, colmenas, núcleos y todo lo necesario para recojer enjambres y dividir tus colmenas.

4- En primavera, incluso al inicio de esta, cuando visites tu colmenar, lleva siempre material para recojer enjambres o hacer divisiones. Si no lo llevas y encuentras alguna de tus colmenas con realeras o enjambrando, te costará dos viajes.

Es preferible llevarlo y no usarlo a tener que volver de nuevo al colmenar o perder tus enjambres.

5- Controla varroa antes del otoño. Hazlo, si puedes, tras la última cosecha de miel, lo antes posible, antes de que avance el otoño.

6- Alimenta con antelación. Valora y revisa las reservas a inicios del otoño y finales del invierno especialmente.

Bueno, un saludo y ya sabes:

¡Anticípate, sé proactivo y no reactivo!

Tus abejas no te esperarán, cuando llegue el momento harán lo que quieran y tengan que hacer. A veces lo harán incluso aunque te anticipes…y eso es lo más bonito de estas «bichitas»…¡que no hay quien las entienda y siempre te sorprenden!