Un truco para no perder tus enjambres

Recuerdo perfectamente la gran ilusión y emoción que sentí la primera vez que vi un enjambre colgado y lo capturé. Lo introduje en una colmena vacía que completé con cuadros de cera estampada. A los pocos días volví a revisarlo y… ¡ no estaba ! ¡No podía creerlo! ¡Las abejas se habían marchado! ¡Me quedé sin enjambre y sin mi nueva colmena!

Algunos de lo que os iniciáis ahora en la apicultura me habéis contado que en este vuestro primer año con las colmenas os ha ocurrido algo parecido.

Uno de los motivos por los que a veces ocurre esto es porque, cuando recogiste el enjambre,este ya había encontrado previamente un lugar para ocupar y adoptar como nueva casa, gracias a la información que les transmiten las exploradoras, que son abejas dentro de este enjambre que se encargan de volar y volar buscando un sitio adecuado para ocupar mientras sus compañeras permanecen colgadas en una rama a la espera de noticias. Es probable que, en poco tiempo, ese enjambre, de no haberlo capturado tú, hubiera volado a esa ubicación.

Si no quieres que esto te vuelva a ocurrir simplemente debes hacer una cosa. Cuando captures el enjambre que encuentres colgado, introduce en la colmena en la que lo coloques un cuadro con cría abierta, cría fresca con huevos y larvas no operculadas que saques de otra colmena del colmenar, reemplazando este cuadro que extraes de dicha colmena por uno con cera estampada.

Si lo capturas fuera del colmenar lo normal es que lo lleves al apiario luego, así que una vez allí haz como te digo. Como complemento, deberías añadirle también un cuadro con algo de alimento, miel y polen sobre todo, ya que esas larvas que acabas de aportar necesitan alimentación constante y el enjambre aún no tiene reservas.

Las feromonas emitidas por la cría abierta harán que rápidamente las abejas de tu enjambre se sientan atraídas por dichas larvas y comiencen a cuidarlas y alimentarlas…y ya nunca las abandonarán, tu enjambre ya no «escapará».

Estas feromonas de la cría juegan un papel importante en el reconocimiento por parte de las abejas adultas de la edad y la casta de las larvas y regular así el tipo de alimentación que darles, que varía en función de esto. Además, ejercen otras dos funciones muy importantes dentro de la colmena:

1-Estimulan la recolección de polen por las obreras

: cuando hay cría, esta emite feromona y las obreras se lanzan a recolectar polen para alimentarla. Cuando no hay cría, no hay feromona y cesa la recolección de polen. Así, cuando veas abejas entrar con polen en tus colmenas, ya sabes, sin abrirla, que hay cría, y por lo tanto, reina casi con toda seguridad.

2-Suprimen el desarrollo de los ovarios de las obreras. Las obreras son hembras, igual que la reina, pero a diferencia de estas tienen sus ovarios sin desarrollar, pero los tienen. Cuando hay cría, hay feromona y estos ovarios continúan sin desarrollarse, a lo que ayuda también la feromona de la reina presente.

Si por algún motivo no hay reina, con el tiempo no habrá cría y finalmente los ovarios de las obreras se desarrollarán y comenzarán a poner huevos, aunque no hayan sido fecundadas, y la colmena se convertirán entonces en zanganera, pues de esos huevos no fecundados nacerán sólo zánganos.

Este efecto supresor del desarrollo de los ovarios por parte de la cría y sus feromonas hace que una colmena, cuando pierde su reina y no puede criar una nueva, no se vuelva zanganera hasta que toda la cría presente ha nacido y queda completamente vacía de cría, tanto abierta como operculada, que también provoca esta inhibición del desarrollo ovárico de las obreras.

Bueno, pues espero que con este pequeño truquillo ya nunca nunca un enjambre que capturas te haga el feo de abandonar la casita que con tanto cariño le proporcionas.

Y además del truquillo, un pequeño consejo : aprender y comprender la biología de las abejas como insectos os ayudará a entender el funcionamiento y comportamiento de la colonia y os facilitará la toma de decisiones y el manejo de la colmena.

Un abrazo a todos, especialmente los que comenzáis con las abejas.